Acabo de amortizar uno de los regalos con que me obsequiaron los reyes. La novela “Mala gente que camina” de Benjamín Prado.
La reseña de la contraportada reza:
Un profesor de instituto investiga, casi por azar, la historia de una enigmática escritora que pese a ser militante de la Sección Femenina y la organización de beneficencia infantil Auxilio Social, publicó una única novela en la que parece denunciar, entre líneas, uno de los mayores dramas de la posguerra: el robo de niños a las presas republicanas para serles entregados a familias afines al Régimen.”
Justo en el día de nochebuena, el profesor Vicenç Navarro escribía en El País el artículo “Los niños perdidos del franquismo“. Como afirma el profesor Navarro, es vergonzoso que la juventud de este país conozca más de los horrores de las dictaduras latinoamericanas que de la nuestra. Cuando no se tiene memoria histórica, se corre el riesgo de votar para que te represente en Europa a un indeseable que se permite afirmar que el franquismo fue un período de extremada placidez.
Si fuera profesor de instituto, como el protagonista de la novela de Benjamín Prado, recomendaría a alumnas y alumnos que leyeran su novela, y que vieran el documental Els nens perduts del franquisme (1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10) al que alude el profesor Navarro en su artículo.
[…] la petición de justicia se define como venganza Si hace unos días citaba al profesor Vicenç Navarro por el artículo “Los niños perdidos del franquismo“, hoy me […]